Para el bien de los que no descubrieron, no vieron, no sintieron y no comprendieron.
Los pensamientos y emociones, ya sabemos científicamente y espiritualmente que son los que generan nuestro estado de vida emocional y física, ya sabemos que de lo que pensamos y sentimos, dependemos……
Con todo mi corazón y esperanza envió este mensaje a todos los que tienen en su corazón y mente algún rencor, dolor, envidia, deseo de venganza, necesidad de dañar, tristeza, pena, agotamiento o todo tipo de negatividad.
Nuestros pensamientos nos proyectan un reflejo desarrollando unas emociones, al tener rencor o otros sentimientos negativos, fabrica y asimila nuestro interior una emoción gemela que se memoriza y se manifiesta en nuestra alma emitiendo un mal estar incomprendido.
Si uno piensa mal o tiene rencor, sus sentimientos concienciados serán lo contrario de la paz y tranquilidad para trasmitirse a sus emociones espirituales e inconscientes, eso significa que estará haciéndose daño a si mismo sin saberlo
Seguramente, cada uno de nosotros vivió por lo menos una vez en su vida algo relacionado con lo citado anteriormente y seguro que si hace memoria, al pensar mal, recordará un malestar durante esta fase.
Odiar a otro o a otros provoca tal negatividad que su estado emocional lo vive por sÍ mismo de forma interna y profunda, esta mecánica depende de una ley universal principal y es como decir que de lo que siembras, recolectarás.
Quizá los predicadores de la buena palabra en prevenir de que nuestras acciones repercutirán en nuestro futuro, también querían decir igualmente que al mismo tiempo que piensas el mal, estas haciéndote el mal a ti mismo.
Esta claro que al tener la paz y serenidad en la mente no provocara nunca un malestar o sino más bien provocará paz y serenidad, pues en el sentido contrario es exactamente igual.
Cada pensamiento provoca tu propio estado mental y emocional lo que significa que somos los dueños de nuestras emociones interiores o que más bien podemos tener el estado psicológico que queremos según lo que decidimos pensar, sentir y trasmitir.
Volviendo a los malos pensamientos que provocan las emociones negativas en nuestro corazón, podemos dividirlos en dos partes, la primera parte sería la de los pensamientos de dañar a otro de forma física o moral y la segunda parte sería la de sufrir el daño físico o moral provocado por otro, en los dos casos Hay una creación de sentimientos negativos “sufrir o hacer sufrir” y estos mismos son los que nos generarán un estado de malestar alejándonos de la ganas de vivir.
LA SOLUCIÓN ES EL PERDÓN
¿Cual es la solución? La solución es simple pero al aplicarla no es tan simple o sea que debemos de experimentar sus beneficios para descubrir que en realidad es sencilla. La solución es en descubrir los magníficos placeres en hacer el bien y en pensar al bien, sentir este bienestar interior, al perdonar con el deseo verdadero de que evolucione y aprenda la otra persona, pasa lo mismo empezamos a sentirnos bien y dejamos de repente en el pasado estas emociones de dolor que nos habíamos condenados a sufrir, “nos liberamos perdonando”.
- ¿Quien no sufrió a volver a ver la persona que le hizo daño?
- ¿Quién no sufrió inconscientemente y a diario este daño?
- ¿Quién descubrió que se libero de todo esto en cuando llego a perdonar?
Los sentimientos negativos de cualquier tipo u origen son los que nos procuran nuestro malestar diario.
- ¿Quién no disfruto de su bienestar en haber hecho algo bueno?
- ¿Quién no disfruto en haber sentido esta libertad y ganas de vivir?
- ¿Quién no descubrió que se sentía más grande en ser bueno y limpio?
SENTIMIENTOS POSITIVOS
Los sentimientos positivos de cualquier tipo u origen son los que nos procuran nuestro bienestar diario.
Nadie es responsable de cómo podamos sentirnos, solo depende de cómo queremos vivirlo, comprendiéndolo o no, lo viviremos como hemos decidido y nuestro estado posterior dependerá de ello.
Al empezar a pensar de forma positiva o sea sin maldad o rencor os daréis cuenta que se vive mejor después y al repetirlo de vez en cuando ya empezaréis a hacerlo automáticamente. Nuestra alma aprende y replica sus actos por su memoria emocional que sea a través del bien o del mal, siempre replica en función de su memoria espiritual. Hacer que la memoria de nuestra alma nos dicte el bien y nuestra vida cambiara por completo aportando paz y amor cotidianamente.
El descubrimiento es, que las acciones y pensamientos malos en realidad nos hacen sufrir más a nosotros que a los que los dirigimos. Eso se puede cambiar solo en decidir trasmitir el bien y aceptar que el mal sólo es una oportunidad de aprender el bien.
Pruébalo y empezarás a sentirte más grande, te sentirás cumplido, te sentirás dueño de tu alma, te sentirás libre, te sentirás vivo, sentirás crecer tu espíritu y podrás respirar más profundo un aire más rico…
A todos los que en esta vida sienten en su interior algún sentimiento negativo, que busquen el origen y hagan la paz con lo que sea para poder estar en paz consigo mismo.
A todos los que piensan mal o hacen el mal, que prueben hacer el bien o pensar bien y que dejen que su cuerpo entero se impregne de estas sensaciones divinas.
Feliz vida a todas las almas del universo, feliz amor y bondad a todos los necesitados, feliz descubrimiento a los apartados de la vida y deseo personalmente que todas estas energías que pueda remover mis pensamientos, se beneficien del amor hacia todos.
BRUNO.
Tomado de;
A que vine 